Summary: | En el presente ensayo se destaca el papel de la universidad como espacio del bien común y de éste como principio rector de la convivencia humana. Se asume al bien común desde la perspectiva ético-moral, enmarcándolo como una práctica necesaria para lograr una justa convivencia humana a partir de la razón y cuya práctica refleja la posibilidad del verdadero encuentro entre el ser y el deber ser. El objetivo principal es resaltar la importancia del sentido común como herramienta espiritual de re-conocimiento de las prácticas éticas y de las oportunidades de convivencia
que caracterizan al mundo universitario, haciendo hincapié en los riesgos que pueden conducir a la pérdida de su verdadera esencia cuando no se asume la práctica del bien común como fuente espiritual para brindar mejor y más eficiente servicio educativo. De ahí que, el sentido común se asuma como una facultad cuyo provecho es el resultado de una convivencia armónica en donde las voluntades y las conciencias se susciten a partir de unos intereses colectivos con la finalidad de encontrar desde la universidad un espacio de verdadero encuentro del saber y el ser.
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