Summary: | El cine ha surgido como un foco de producción en el que las representaciones de las sexualidades se construyen e inscriben dentro del discurso simbólico del poder y la película cubana Fresa y chocolate representa un ejemplo esclarecedor. El objetivo de Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío es hacer explícita la construcción social del orden simbólico dominante y los problemas involucrados en su deconstrucción, para mostrar hasta qué punto la política sexual está profundamente arraigada en todas las formaciones culturales y sociales a lo largo de la historia. Este estudio intenta dilucidar la relación dialéctica entre el orden simbólico social —la norma— y la conciencia individual. Los cineastas construyen estratégicamente la relación y los conflictos y contradicciones que surgen de ella, incluida la crítica de algunos aspectos de la Revolución Cubana, a saber, el pathos de la cultura queer, lo que potencia la diferencia sexual como un elemento de cambio social.
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