Summary: | <p>Hace unos pocos días la prensa nos contaba como dos ingenios atómicos estallaban en Atolones del Pacífico, esas dos explosiones conmovían al mundo y la onda explosiva de esas dos bombas de hidrógeno tocaron a los académicos de todas partes. Desafortunadamente pocos se sintieron en Colombia, pero llegaron al corazón de Europa y de Asia; tocaron al mundo y tocaron a los académicos que de alguna manera habían sido sus creadores. Esas dos bombas de hidrógeno eran apenas los experimentos hechos por una misión de varios que las tienen y apenas son experimentos de muchos que comenzaron siendo experimentos sobre seres humanos. Dos bombas atómicas habían explotado ya hace 50 años, mas o menos para los mismos días, sobre dos ciudades del Japón, una de ellas disparada a las ocho y cuarto de la mañana, cuando la gente iba al trabajo, y se encontraba fuera de los refugios antiaéreos; apenas unos pocos bombarderos, en una ciudad que estaba acostumbrada a ver oleada tras oleada de bombarderos; para no despertar temor la lanzaron a la altura necesaria para producir la mayor destrucción posible; eso lo habían hecho académicos.</p>
|