Summary: | Gran parte de la provincia malagueña carece de serios estudios toponímicos, muy especialmente su zona centro-occidental. En el suroeste provincial, las poblaciones de Casares y Manilva sufren la constante pérdida de su patrimonio toponomástico como consecuencia de la ingente presión urbanística y la aparición de nuevas denominaciones con evidentes fines comerciales. Estos territorios, cuyas huellas históricas remontan al Paleolítico, vivieron hasta finales del siglo XV bajo dominio árabe. En este breve estudio, apoyado no solo en la encuesta oral sino también en la consulta de las más diversas fuentes inéditas así como editadas, abordamos el análisis de tres topónimos pertenecientes a esta zona que consideramos parte del legado onomástico andalusí.
|