Summary: | El divertículo de Zenker (DZ) es una protrusión adquirida de la pared esofágica. El tratamiento se reserva para los casos sintomáticos. En nuestro país, el DZ ha sido históricamen - te de manejo quirúrgico. En 1995, Ishioka y Mulder pu - blicaron sus experiencias usando endoscopios flexibles, desde entonces, una amplia variedad de diferentes técnicas se han comunicado. Objetivos. Dar a conocer los resultados y las modificaciones en la técnica desarrollada en nuestro centro. Material y métodos. Se revisó la base de datos de 57 pacien - tes (36 hombres), con una media de edad de 72 años (rango: 37-98), con DZ sintomático, que se sometieron a una mio - tomía endoscópica desde diciembre de 1997 hasta abril de 2015. Todos los procedimientos se llevaron a cabo en nuestro servicio, por el mismo endoscopista (HM), bajo sedación pro - funda administrada por un anestesiólogo. El síntoma más frecuente fue la disfagia (94,7%), la que fue registrada con un puntaje de 0-4 (0=sin disfagia, 1=para sólidos, 2=semi - sólidos, 3=líquidos y 4=saliva). Los nueve primeros casos se realizaron exponiendo el tabique con una sonda nasogástrica, y los otros con un diverticuloscopio. La miotomía se realizó en todos los casos con needle knife y se utilizó corriente de coagulación pura para evitar el sangrado. Se colocaron clips para aproximar los colgajos mucosos y disminuir el riesgo de perforación y sangrado. Resultados. Se realizaron 70 proce - dimientos en 56 pacientes. Un paciente fue excluido debido a una miotomía incompleta por un evento adverso mayor. El 98% de los pacientes tuvo una resolución o mejoría de la puntuación de la disfagia a los 30 días. Tres pacientes con re - gurgitación, como único síntoma, resultaron completamente asintomáticos. La mediana de seguimiento fue de 25 meses (rango: 1-99). Treinta y siete pacientes fueron seguidos al menos durante 1 año y el 97,3% tuvieron una buena evo - lución. En 13 casos (22,8%) fue necesaria una reinterven - ción, con buenos resultados en el 100%. Un paciente presentó hemorragia que requirió cirugía (1,4%) y otro una inter - vención quirúrgica debido a problemas técnicos. No hubo perforaciones o infecciones. Conclusión. El tratamiento del DZ con endoscopio flexible es una opción segura y eficaz, con buenos resultados a largo plazo. Necesitamos ensayos clínicos randomizados que comparen diferentes opciones terapéuticas para poder recomendar una estrategia definitiva. Hasta en - tonces, aconsejamos que se utilice la técnica con la que cada centro tenga mayor experiencia y se sienta más cómodo.
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